El 27 de mayo pasado tuve la oportunidad de realizar un evento para presentar mi segundo libro. Fue un día verdaderamente emotivo y muy gratificante. Lo que más me ilusionó fue la posibilidad de encontrarme en persona con nuestro increíble equipo de trabajo, familiares, amigos, clientes y proveedores para mostrar mi más reciente publicación.
A las dos de la tarde estuve en Proyecto Público Prim, un lugar de ensueño en donde armamos un ambiente casual y acogedor para convivir entre todos. A las 3 pm empecé entrevistas con distintos medios y a las 5 tuvimos una rueda de prensa para hablar de este trabajo. Me hicieron preguntas muy interesantes y conversamos apasionadamente sobre diseño, arquitectura, interiorismo y por supuesto del hogar.
Para las siete de la tarde el lugar estaba a rebosar con todos los invitados muy animados y entusiasmados. Para iniciar la presentación formal conté con la participación de Eugenia Gonzalez, socia fundadora de Círculo Cuadrado, con Lorenzo Díaz, incansable promotor del diseño y la arquitectura, con Armando Cervantes, encargado del diseño editorial del libro, con Leonardo Palafox, fotógrafo y con el escritor del prólogo, mi querido y amado esposo Gabriel Pliego. Todos compartieron palabras muy generosas, sobre mi trabajo, sin duda las que más me conmovieron fueron las del “esposo.”
Cuando fue mi turno empecé por responder la siguiente pregunta: ¿Por qué hacer otro libro? Mi respuesta fue: porque me gusta compartir lo que amo y en esta publicación se conjugan algunas de mis grandes pasiones: primero mi amor a los libros, pues me sigue produciendo una gran emoción cuando tomo un hermoso ejemplar en mis manos, siento un gran placer al pasar sus páginas y amo el olor a papel.
En segundo lugar me apasiona el diseño, transformar espacios es algo que me ha fascinado desde que tengo uso de razón, compartir algunos de nuestros más recientes proyectos me llena de orgullo y satisfacción al comprobar lo que somos capaces de hacer.
En tercer lugar me encanta la fotografía, yo soy de esas personas que para disfrutar necesito desesperadamente fotografiar todo aquello que llama mi atención; siempre estoy captando momentos e instantes y esto me permite observar mejor, mirar con atención y ver más allá de lo evidente. Sin duda, esta obsesión que tengo de guardar instantes bellos me ha ayudado a realizar mejor mi trabajo profesional.
Por último, mi amor por la familia. En el título de este libro: HOGARES luminosos y alegres, se centra mi forma de pensar, de vivir y de luchar, pues la vida cobra sentido cuando la compartimos con nuestros seres queridos y qué mejor que poderlo hacer en un hogar lleno de luz y alegría que nos permita disfrutar más de la vida.
En este libro quise explorar algunos criterios que, desde mi punto de vista, son fundamentales para crear y conformar un hogar luminoso y alegre. En cada uno de los siete capítulos fui desarrollando lo que significa cada concepto para mí: la identidad, la sencillez, la elegancia, el optimismo, la ilusión, la serenidad y la gratitud.
Como bien dice el conocido refrán: “es de bien nacidos ser agradecidos” y la creación de este libro no sería posible sin el apoyo de muchísimas personas que hacen que mi vida sea más completa, empezando por mi mamá a quien le debo tanto, ella me enseñó desde pequeña el valor de hacer las cosas bien hechas y el cuidado de cada mínimo detalle.
A mi padre que me introdujo desde mi más tierna infancia en el mundo del diseño y de la arquitectura. A mis hermanos, especialmente a Pollita que vino desde Puebla para estar conmigo ese día tan especial. A mis amigos de la infancia, de la juventud y de la vida.
Siguiendo por nuestros increíbles clientes, cada uno de los que ha confiado en nuestra firma para reinventar su espacio. Para nosotros es un honor y un privilegio poder colaborar con personas tan especiales y únicas. En cada proyecto que realizamos tenemos la oportunidad de conocer distintas formas de ser y de vivir, y para mí y para todo el equipo, cada proyecto es una nueva oportunidad de aprendizaje.
Hablando de nuestro equipo quiero agradecer públicamente a toda nuestra familia MC, sin cada uno de ellos y su maravillosa actitud no podría hacer lo que tanto me apasiona.
A veces nuestros clientes solo ven a unos pocos de los que trabajamos para realizar cada proyecto y al final yo me llevo el aplauso pero el trabajo es en conjunto y aunque la firma lleve mi nombre es gracias a todo un equipo que las cosas suceden.
Para concluir con este texto, quiero citar las generosas palabras de Armando Cervantes, que me llenaron de alegría, de emoción y me parece que resumen la esencia de este proyecto:
“Conocí a Mariangel haciendo su primer libro y gracias a eso hoy estoy aquí y me siento muy afortunado de formar parte de un nuevo libro: un libro donde hay vida y realidad.
En un mundo en el que hay tantas propuestas de diseño de interiorismo tan variadas y tan diversas, lo que las distingue realmente, tiene que ver: con el lugar de donde surgen: la inspiración y hacia dónde se dirigen: la intención.
El trabajo de Mariangel surge desde un lugar muy íntimo y honesto. Nos permite entrar, por medio de sus ojos —esas ventanas de su universo personal que nos comparte a través de sus fotos— a esa manera de experimentar el mundo, a esa única armonía en el uso del color que se hace patente en cada uno de los rincones diseñados por ella: una armonía que sólo ella lleva en la mirada.
El trabajo de Mariangel y su equipo, aunque se concreta en óptimos espacios diseñados, en el fondo, su intención va dirigida a valores de la vida. Porque un verdadero hogar es mucho más que un espacio físico para vivir; es un lugar que ya ha sido transformado por la presencia humana, es un lugar de seguridad y arraigo de una persona o de una familia.
Un hogar luminoso y alegre no hace referencia a las cualidades objetivas del interiorismo, sino a las personas que habitan y viven esos espacios… al ambiente que construyen los seres humanos con su interacción en el día a día.
La luminosidad en este libro va mucho más allá de las cualidades físicas de la luz, se trata más de una luminosidad interior, porque los preceptos que guían el trabajo de Mariangel son los mismos que guían su vida familiar: la identidad, la sencillez, la elegancia, el optimismo, la ilusión, la serenidad, la gratitud, esa gratitud con la que nos recibe en su hogar con la chimenea encendida, con flores y la mesa puesta. Un hogar, por supuesto, luminoso y alegre construido como este libro, con mucho, mucho amor.
Por eso y más es un gusto estar aquí y ser parte de su equipo.”
¡Hasta la próxima!
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